A medida que las personas continúan adoptando la idea de vivir con propósito, tomando decisiones que benefician a otras personas, más de nosotros buscamos lugares para invertir nuestro tiempo y talentos.

Se siente bien ser voluntario y ayudar a quienes están a nuestro alrededor. No solo entrega un propósito más amplio, sino que puede hacerte sentir más equilibrado e incluso, más feliz. Mantener tu búsqueda de una vida consciente a nivel local significa que estás contribuyendo con tu comunidad y generando un impacto en la vida de las personas que te rodean, posiblemente incluso en tu vecindario.

A veces puede ser difícil saber por dónde empezar. Hay un sinfín de formas en las que puedes tener un impacto en tu comunidad. Los primeros pasos son encontrar los mejores lugares para invertir tu tiempo y hacer las conexiones que te darán un buen comienzo. Con tantas posibilidades frente a ti, veamos las formas más simples de comenzar a ayudar a otros.

Conviértete en mentor

Aceptar ser el mentor profesional de alguien es una gran manera de usar todo el conocimiento y la experiencia de vida que has acumulado para ayudar a otra persona a avanzar en su carrera. No es un gran compromiso de tiempo. Dependiendo de tu horario, puedes reservar una hora a la semana para reunirte con tu colega o amigo en una cafetería local, conversar en línea o disfrutar de una caminata a la hora del almuerzo. Es una buena oportunidad para compartir tus estrategias sobre cómo avanzar en el lugar de trabajo, y también tus consejos para lograr un equilibrio entre el trabajo y la vida, aparte de la mejor manera de hacer malabares con el horario.

También puedes optar por dedicar tu tiempo a guiar niños que viven en tu área. Los programas de la organización «Big Brothers Big Sisters of America» son un gran ejemplo. Estos programas no solo ofrecen asociaciones en el lugar de trabajo para que puedas guiar a un niño mostrándole diferentes trayectorias profesionales, sino que también puedes ser voluntario directo unas horas al mes inscribiéndote en las organizaciones locales de Big Brothers y Big Sisters. Te enlazan con un niño de tu área y aceptas pasar tiempo cada dos semanas con ellos. Tú y «el pequeño» pueden divertirse con juegos de mesa, ver una película o incluso ir de excursión. Se trata de proporcionar atención personalizada y un oído atento.

Ya sea que te decidas hacer una pequeña tutoría con adolescentes o con un compañero de trabajo, asegúrate de tener una bolsa de refrigerios a mano para que el tiempo sea más divertido. Los Chips de granos enteros BodyKey™ vienen en bolsas de una sola porción y son perfectos para llevar en una bolsa de refrigerios. Mientras estás en ello, añade unas cuantas botellas de la Perfect Empowered Drinking Water™, que es ionizada y rica en oxígeno.

Voluntario en tu comunidad

Enfocar tu vida «con propósito» cerca de casa es un ganar-ganar para ti y tus vecinos. Al elegir ser voluntario en tu comunidad, estás marcando una diferencia en tu ciudad de residencia y podrás ver de primera mano la diferencia que tu contribución está haciendo en la vida de las personas. Es probable que hayan muchas oportunidades para ser voluntario localmente. Estas incluyen centros juveniles, que a menudo necesitan que las personas donen algunas horas de su tiempo después de la escuela y los fines de semana para ayudar a los niños con la tarea, organizar deportes, juegos y otros eventos. Los refugios para personas sin hogar son otra oportunidad. Si bien están a cargo de personal capacitado, generalmente se necesitan voluntarios para ayudar a servir comidas, clasificar los artículos donados y ser mentores de hombres, mujeres y familias que están tratando de recuperar sus vidas.

Si tienes talento para un oficio, considera ofrecer tus habilidades a una persona o familia de bajos ingresos que necesite tu ayuda. Fontanería, electricidad, calefacción y refrigeración, reparación de automóviles y construcción, son esas clases de trabajos que pueden ser demasiado costosos para los vecinos que están luchando financieramente. A veces pueden tener el dinero para las partes necesarias, pero no la mano de obra. Esta es una carga con la que puedes ser lo suficientemente hábil para levantar por ellos. A menudo, este tipo de donación se puede compartir boca en boca, pero también puede comunicarse a través de las iglesias locales o centros para personas mayores y preguntar si hay personas que podrían necesitar tu ayuda.

Compra local

Comprar local es una excelente manera de marcar la diferencia en tu propia comunidad. Cada vez que pones tu dinero en un negocio local e independiente, ya sea una tienda minorista o un restaurante, estás fortaleciendo esa pequeña economía, brindando empleos a tus vecinos y haciendo tu parte para mejorar el medio ambiente. Las encuestas nacionales han encontrado que hay un «efecto multiplicador» cuando se compra localmente, esto significa que por cada dólar que gastas este trae hasta $ 3.50 a tu comunidad. Vivir en una ciudad o pueblo pequeño donde puedes caminar o andar en bicicleta para hacer tus compras en las empresas locales reduce la cantidad de automóviles en las calles y la cantidad de gases de efecto invernadero que se emiten al aire, manteniéndolo más limpio.

Asiste a las reuniones comunitarias

Si deseas una vista realista de lo que está sucediendo en el lugar en donde vives, tómate el tiempo para asistir a una reunión comunitaria en tu área. Podría significar reservar una o dos horas para una reunión del consejo de la ciudad, donde descubrirás cómo sus funcionarios electos están asignando tus dólares de impuestos, y podrás ver rápidamente cualquier proyecto de trabajo para las calle, edificios o parques planificados para el futuro. O podrías participar en la reunión regular de la junta escolar local, o en una reunión dirigida a un evento específico que está por realizarse. Las reuniones comunitarias te permiten familiarizarte con nuevas personas de tu vecindario y desarrollar relaciones más profundas con las de tu comunidad. También te alertarán sobre muchas oportunidades de voluntariado comunitario que podrían interesarte.

Organiza una limpieza comunitaria

Si tu ciudad aún no tiene una, ofrécete como voluntario para organizar una limpieza comunitaria. Ofrécete para trabajar con los funcionarios de la ciudad para crear un evento local que ayude a limpiar los parques públicos, las calles del vecindario y los parques infantiles locales. Es una buena manera de unir a las personas con el objetivo compartido de hacer que el vecindario se vea más agradable. Y no olvides organizar una fiesta posterior para agradecer a todos los voluntarios. Esto permite a las personas celebrar su logro compartido y hacer nuevos amigos al mismo tiempo.

Una vez que hayas decidido que contribuir es la forma correcta de pasar tu tiempo extra, te sorprenderás de la diferencia que puedes hacer en tu propia comunidad y de lo bien que te hará sentir.